El proceso de enseñanza-aprendizaje en la educación se considera un problema en la investigación educativa por lo que requiere apoyarse de las diferentes teorías que han abordado el tema, teniendo en cuenta la realidad de la práctica educativa de estos tiempos. Con el presente trabajo deseamos ofrecer ideas y reflexiones sobre los estilos y tipos de aprendizajes, a partir de la utilización racional de las teorías y la práctica del proceso de aprendizaje, al tener en cuenta el desarrollo cambiante del individuo y del grupo, las situaciones educativas que se dan en el aula, la formación ético-política, el currículum, como los procesos de intercambio de intereses, motivaciones profesionales y valores de responsabilidad entre otros, que se dan en el grupo del aula, así como los problemas epistemológicos implicados en la construcción y reconstrucción del conocimiento, evidencian el significado en el momento actual del debate sobre el proceso de aprendizaje. Las diferentes teorías del aprendizaje expresan de forma clara, no sólo la disparidad de enfoques, sino sobre todo, la existencia de distintos tipos de aprendizaje, por lo que asumimos que el aprendizaje constituye un reflejo de la realidad por parte del sujeto y como tal se produce en la actividad que desarrolla cada individuo en su contacto con los objetos, con las demás personas y que cada persona aprende de manera distinta a las demás, utiliza diferentes estrategias para aprender, lo hace con diferentes velocidades e incluso con mayor o menor eficacia aunque tengan las mismas motivaciones, el mismo nivel de instrucción o la misma edad. Consideramos que los enfoques y estilos de aprendizaje constituyen un problema contemporáneo de la educación, que aún no se ha llegado a soluciones concretas, apreciando que se debe tener en cuenta, tanto los factores y las variables que intervienen en el proceso de aprendizaje, como la singularidad de los mismos procesos cognitivos y afectivos implicados en el aprendizaje, considerando que estilo de aprendizaje se refiere básicamente a rasgos o modos que indican las características y las maneras de aprender de una persona y que las formas que se empleen para la asimilación de esos conocimientos de la cultura que están en dependencia de las posibilidades, potencialidades cognoscitivas y afectivas del individuo y es lo que se considera como tipo de aprendizaje. La teoría y la práctica pedagógicas se enfrentan con el problema teleológico de cómo intervenir para provocar determinada forma de ser, de aprender, de sentir y actuar. Su objetivo no es, necesariamente, reproducir los modos de comportamiento de la comunidad social, entre los cuales se encuentran las formas de aprender, sino cómo potenciar una forma de ser y aprender frecuentemente discrepante con los modos inducidos espontáneamente de la sociedad. Las teorías del aprendizaje suministran la información básica, pero no suficiente para organizar la teoría y la práctica de la enseñanza. Entonces a partir de experiencia de la práctica educativa ofrecemos pasos metodológicos para ayudar a los estudiantes a identificar su estilo y tipo de aprendizaje, con la guía del profesor, en tanto se le brinde especial atención a la interacción de los procesos de motivación, atención, asimilación, organización, recuperación y transmisión del conocimiento de intercambio social, dentro y fuera del aula, dentro y fuera del recinto escolar ya que es de gran importancia para comprender y orientar los procesos de aprendizaje y desarrollo del individuo.