Las estrategias de aprendizaje es un tema de preocupación en los contextos académicos, principalmente en el universitario. En la actualidad, hay una serie de posturas que formulan tres tipos de interpretaciones relacionadas con el proceso de instrucción-aprendizaje: el aprendizaje como adquisición de respuestas, el aprendizaje como adquisición de conocimiento y el aprendizaje como construcción de significado. Esta última, destaca el papel del estudiante como un ser autónomo, auto-regulador, activo, inventivo, creativo, innovador, que conoce sus propios procesos cognitivos y tiene en sus manos el control de su aprendizaje. Es quién procesa los contenidos de información y como resultado de ese procesamiento, da sentido a lo que aprende y construye significados (Pozo, Monereo & Castelló, 2001; Nisbet y Shucksmith, 1987). Las instituciones de educación superior plantean un nuevo concepto de educación, a través del desarrollo de conocimientos y herramientas necesarias para aprovechar la diversidad, la convergencia de culturas, la gran cantidad de información disponible. Las estrategias de aprendizaje son conductas o pensamientos que facilitan el aprendizaje (Mayor, Suengas y González, 1995). Estas estrategias van desde las simples habilidades de estudio, como el subrayado de la idea principal, hasta los procesos de pensamiento complejo como el usar las analogías para relacionar el conocimiento previo con la nueva información (Weistein y Mayor, 1987). Díaz-Barriga y Hernández (2004) comentan que las estrategias de aprendizaje son procedimientos (conjunto de pasos, operaciones o habilidades) que un estudiante emplea en forma consciente, consistente, controlada e intencional como instrumentos flexibles para lograr aprendizaje significativo y solucionar problemas. El objetivo fue relacionar las estrategias de aprendizaje y el rendimiento académico en estudiantes de la licenciatura en contaduría del Centro Universitario UAEM Temascaltepec dependiente de la Universidad Autónoma del Estado de México. La población estuvo formada por 132 estudiantes de los semestres segundo, cuarto, sexto y octavo. Se utilizo el instrumento de escala de estrategias de aprendizaje ACRA estudiando la adquisición, codificación, recuperación y apoyo de la información; además se identifico la frecuencia de utilización y su relación con el rendimiento académico. La información se proceso con el paquete estadístico SPSS. Para la escala de adquisición con sus estrategias, los cuatro semestres presentan un grado débil, excepto subrayado lineal para los semestres segundo y sexto, así como repetición en voz alta para sexto y repaso reiterado para segundo semestre con grado de utilización alta. En la escala de codificación con sus estrategias, los cuatro semestres presentan grado débil, excepto la estrategia de relaciones compartidas en sexto semestre con grado de utilización alta. Para la escala de recuperación con sus estrategias presentan grado débil en los cuatro semestres, excepto las estrategias de planificación de respuesta y respuesta escrita para el sexto semestre con grado de utilización alta. En la escala de apoyo con sus estrategias, los cuatro semestres obtuvieron grado de utilización débil, excepto motivación de escape para segundo semestre; en autocontrol, interacciones sociales, motivación intrínseca, extrínseca y motivación de escape para sexto semestre con grado de utilización alta. Con respecto a la correlación, se obtuvo diferencia significativa para las estrategias de subrayado lineal y motivación de escape.